Entrevista Diario Clarín

El diario Clarin realizo una entrevista con Rodrigo a solas…disfrútenla:

«Quieren que haga dos goles por partido, pero no es así»

-¿Recuperaste la felicidad futbolística?

-Sí, recuperé un poco el nivel, aunque todavía me falta.

-¿Por qué bajaste en los últimos meses y qué cambió ahora?

-El semestre pasado arranqué bien, pero me lesioné el dedo, estuve un mes parado y cuando volví no tuve buenos partidos. Me fue bajando la confianza. Al ver que no rendía, me bajoneaba. Después empecé a errar goles, y bueno… En un momento ya sabía que iba a errar.

-¿Tan así era?

-Sí, así. Mirá, en la semifinal con Cúcuta, acá, Ledesma tiró el centro atrás y yo, en el área chica, pateé por arriba. Ahí ya no quería saber más nada. No quería ni que me la pasen. Ya sabía que iba a errar. Se me cerró el arco.

-¿Es verdad que a veces a los delanteros se les achica el arco?

-No sé. Yo no tenía confianza. Son rachas. Cuando vine a Boca, hice un montón de goles en muy poco tiempo. Entraban todas. Y ahora estos seis meses… Seis meses que tampoco fueron malos, porque hice once goles. No es poco. Pero erré algunos que debía hacer. Y eso puede pasar. Nadie es perfecto. La gente y los periodistas piensan que uno tiene que hacer goles siempre. Pero muchas veces uno viene corriendo a mil y hay que pegarle así, a la carrera. No es tan fácil, eh, sino jugaríamos todos. Además, no soy goleador. No soy un 9 de área de 15 goles por torneo. Soy un delantero que juega por el frente de ataque y a veces mete goles.

-¿Se te exige demasiado?

-Sí. Por ahí siento que todos los partidos quieren que ande rebien… A veces los defensores me ganan. Y al otro domingo yo me despierto mejor y les gano. Acá parece que quieren que Palacio haga dos goles todos los partidos, pero no es así. Es un equipo… En la Copa no jugué mal, pero no jugué como quería. Jugué normal, la ganamos y fui el hombre más feliz del mundo. No me importó cuántos goles hice. A veces se destacan unos y a veces otros.

-Se te exige porque sos una de las joyas de Boca.

-Eso lo dicen ustedes. Yo no me la creo cuando dicen que soy la joya de Boca. Soy uno más. Siempre laburé y entrené con todo, para estar bien y aprender.

-¿Cómo buscás mejorar?

-Mirá, me gustaría tener el cabezazo de Palermo y la definición de Boselli. A Martín le tirás un centro y lo hace el gol. Y Mauro es muy frío con los arqueros. Por ahí yo tengo más movilidad, puedo jugar más por afuera. Obvio que me gustaría definir como Mauro y Martín. Eso debo aprender. Pero no se aprende a definir de un día a otro como Tití Henry.

-Rodrigo, ¿es cierto que rechazaste una oferta de 15 millones de euros de Olympique de Lyon?

-Sí, me llegó el comentario, me preguntaron y dije que no.

-Es fuerte.

-Sí. Me quería quedar un tiempo más. Ahora no me convencía. Fue todo muy rápido, ¿entendés? Me llamaron, me dijeron que estaba arreglado y tenía que contestar porque en tres días cerraba el libro de pases. Y yo lo quiero pensar. No me voy a ir donde por ahí me siento mal. ¿Para qué?

-¿Boca ya compró todo tu pase?

-Sí.

-¿Eso obliga a pensar que en Boca no hay Palacio para rato?

-Y… Lo que pasa es que Boca por ahí me va a querer vender para recibir algo de plata.

-¿Hoy no te animás a decir: «Hay Palacio para rato en Boca»?

-Qué sé yo. También pesa la decisión del jugador, eh.

-Lo claro es que a cualquier parte no te vas.

-No, no. Seguro que no.

-¿Querés irte a un equipo pesado-pesado de España?

-Cuando digo cualquier parte, quiero decir Rusia y esos países…

-Olympique de Lyon es un club importante. ¿En otro momento podría interesarte?

-Sí, sí, claro. Ganó varios campeonatos de Francia, juega Champions. Es el mejor de Francia. Pero no es que estoy esperando irme a un club de primer nivel. Quiero ir a un lugar donde me sienta cómodo. Ponele: no tengo problemas en ir a un club de mitad de tabla de España.

-¿Y si una propuesta como la del Lyon llega en diciembre?

-Si en diciembre viene una oferta, si voy a estar bien en ese lugar y si al club le conviene, bueno… Se dará. Y si no me quedaré acá porque estoy recómodo. Hay buen equipo, buen grupo, buenos amigos. Tengo todo en Boca.

Para Palacio, como Guille no va a haber ninguno

Que los hinchas de Boca quieren a Rodrigo Palacio se certifica asistiendo a un partido y escuchando como lo acarician gritando su nombre. Es un tema que el bahiense aborda con satisfacción: «A la gente de Boca le estoy muy agradecido. Que me traten bien me ayuda a estar mejor, a tener más confianza. Siempre estuvieron en las difíciles. ¿Viste que recién te contaba lo que me pasó con el Cúcuta?»

-Sí, sí.

-Bueno, al mismo tiempo esa fue una de las noches más lindas desde que estoy en Boca.

-¿Por qué, Rodrigo?

-Ese día, perdíamos 1 a 0 con el Cúcuta, erré el gol abajo del arco, después me perdí otro y, a pesar de que estábamos quedando afuera de la Copa, la gente coreó mi nombre. Mirá que ese era un momento muy difícil. De ese día nunca me voy a olvidar.

-¿Vas en camino de ser ídolo o ya sentís que lo sos?

-Nunca pensé ni se cruzó por la cabeza ser ídolo. Si se tiene que dar algún día, se va a dar. Pero yo sé que es muy difícil que sea ídolo. Para ser ídolo tenés que estar mucho tiempo en el club, tenés que ganar muchas cosas, tenés que andar siempre bien. Y por ahí se complica. Idolo es Martín, que ganó no sé cuántas Libertadores, que metió 160 goles. Idolo es Guille (Barros Schelotto), que ganó como 15 títulos. Y hoy por hoy, yo no tengo nada de eso.

-Tenés 6 títulos y 53 goles en 2 años y 9 meses.

-Sí, estoy reconforme con todo lo que hice en Boca. Si alguien me decía que me iba a ir tan bien acá, no le creía. Pero al lado de Martín y de Guille, yo no tengo nada. Obvio que me gustaría ganar un montón de cosas más en Boca y meter miles de goles. Si el día de mañana lo logro, tal vez la gente me reconocerá como ídolo.

-¿Sabés que compararte con Guillermo es inevitable?

-Como Guille no va a haber ninguno. Yo no voy a ser como Guille. No: Guille es Guille y es el mejor. Guille, Román y Maradona van a ser lo ídolos máximos de Boca. Ojalá a mí me vaya bien y me recuerden como buen jugador y, más que nada, como buena persona. Ser buena gente es lo principal. El fútbol pasa y después de los 35 años hay que seguir viviendo. Es esencial dejar un lindo recuerdo como tipo.

-¿Cuál fue el mejor consejo que te dio Barros Schelotto?

-Un montón de cosas. Pero apenas llegué, antes del primer partido, justo me tocó concentrar con él. Y me habló. Me dijo que en Boca tenía que jugar como en Banfield, como siempre, que así me iban a salir a las cosas. Por suerte me lo tomé así y empecé a jugar como en Tres Arroyos, como en Bella Vista.

Y mal no le fue.

~ por Naty en septiembre 8, 2007.